miércoles, 8 de diciembre de 2010

Ejercicios Teatrales (Fotos)
















Ejercicios teatrales y obras cortas.
Jóvenes estudiantes de la Cátedra de Teatro. (4to año)
Colegio Latinoamericano II, La Paz, El Paraíso.
Año escolar: 2009-2010
Direccción: Prof. Sol Piñero

Ejercicios Teatrales en Niño Simón (Fotos)












Ejercicios teatrales y juegos escénicos.
Niños y niñas de la U. E. B. Niño Simón
Área: Artes Escénicas
Año Escolar: 2009-2010
Dirección: Prof. Sol Piñero

El Barquero y los Estudiantes (Texto)

Cuento original: Ramakrishna
Versión para teatro: Sol Piñero

NARRADOR: La historia comienza cuando el barquero da la bienvenida a la barca a todos los turistas, resaltan unos estudiantes muy jóvenes, quienes se sientan cerca de barquero, como para no perderse nada, el barquero es una persona muy humilde, pero muy amable.
BARQUERO: Bienvenidos, jóvenes, espero que disfruten del paseo...
ESTUDIANTES: ¡Gracias!
NARRADOR: Los pasajeros comienzan a disfrutar del paisaje, solo los estudiantes comienzan a hablar con el barquero, de manera presumida…
ESTUDIANTE 1: ¿Señor, ha estudiado usted Historia y Geografía para hablar de esto a los turistas que pasea en su barca?
NARRADOR: El barquero se sorprende un poco, pero responde, apenado…
BARQUERO: No, nunca he estudiado nada, joven...
ESTUDIANTE 2: ¿Entonces, usted, desconoce la inmensidad del mundo con todos los pueblos que hay en él?... ¡Eso es muy grave! ¡Muy grave!
BARQUERO: Me temo que sí, nunca pude ir a la escuela
ESTUDIANTE 1: ¡Qué vida tan malgastada! Yo, en cambio he estudiado mucho de Historia y de Geografía y he viajado a muchos países con mis padres...
NARRADOR:  El barquero hace un gesto de resignación y suspira ante la respuesta del muchacho…
ESTUDIANTE 2:¿Y no ha estudiado Ciencias: Biología, Matemática o Física?
BARQUERO: Tampoco, no sé de qué me está hablando, joven...
ESTUDIANTE 1: En tal caso, usted, no tiene una visión muy profunda de las cosas yo diría que ha perdido la mitad de tu vida... ¡Eso es muy grave! (PRESUMIENDO) Yo, en cambio he participado en Jornadas Internacionales y aún soy solo una adolescente...
ESTUDIANTE 2: ¿Y ha estudiado Literatura e Idiomas? Sería conveniente que hablara inglés
BARQUERO: Apenas habla el lenguaje del pueblo, por eso hablo poco con los turistas como usted... me dedico a conducir mi barca y nada más...
ESTUDIANTE 1: Sin duda, usted ha perdido desde luego una buena parte de su vida... ¡Eso es muy grave! (PRESUMIENDO) Yo, en cambio con mi corta edad ya hablo dos idiomas
NARRADOR: El barquero permaneció silencioso, transcurrió algún tiempo y de repente de desató una violenta tempestad. El viento soplaba con fuerza y la barca estaba a punto de naufragar. Los rostros de los estudiantes estaban pálidos, estaban muy asustados El barquero serenamente les preguntó:
BARQUERO: ¿Jóvenes, ustedes sabe nadar?
ESTUDIANTE  2: No, señor, yo nunca aprendí a nadar...
ESTUDIANTE 1:Tampoco yo… y tengo mucho miedo… ¿Usted si sabe nadar?
BARQUERO: ¡Eso si que es grave! ¡Muy grave!... Entonces parecen que van a perder no una buena parte de su vida sino, toda su vida, y en un solo instante... Yo, en cambio, sí sé nadar, fue lo primero que aprendí en el río de mi pueblo... pero, no se preocupen yo los voy a enseñar para que salven sus vidas…
NARRADOR: El barquero no había estudiado mucho a lo largo de su vida, pero si tenía muy claro no presumir y en cambio ayudar a todo el que lo necesitara…

Fin

El arte de enseñar. (Texto)

Texto Original: Confucio
Teatralización: Sol Piñero

EL ESCENARIO SE TRATA DE UN LUGAR MUY ESPECIAL, PODRÍA SER UN PARQUE O UNA PLAZA, EL PROFESOR ESTÁ SENTADO EN UN PEQUEÑO BANQUITO, SE HA SENTADO SOLO A DESCANSAR POR UN RATO Y DE PRONTO SE VE RODEADO DE ALUMNOS QUE COMIENZAN A HACERLE PREGUNTAS:
ALUMNO 1.- Usted, que puede explicar muy bien todo lo que siente... ¿por qué no va y habla con el Emperador para que le permita trabajar con él en el palacio?
EL PROFESOR.- El Emperador hace bellos discursos, pero los bellos discursos pueden aprenderlos todos, eso no significa que sean educativos...
ALUMNO 2.- Entonces, envíele el libro de poemas que usted escribió.
EL PROFESOR.- Los trescientos poemas escritos allí se resumen en una sola frase: “Piensa correctamente”... ése es el secreto.
ALUMNO 3.- ¿Qué es pensar correctamente?
EL PROFESOR.- Es saber usar la mente y el corazón, la disciplina y la emoción... Cuando se desea una cosa la vida nos guiará hacia ella por muchos caminos.  Muchas veces nos dejamos confundir porque nos sorprenden los caminos y creemos que estamos yendo en la dirección equivocada...  Por eso les he dicho déjense llevar por la emoción, pero mantengan la disciplina de seguir adelante...
ALUMNO 4.- ¿Y usted hace eso?
EL PROFESOR.-  A los quince años empecé a aprender...
ALUMNO 1.- ¿Y a los treinta años?
EL PROFESOR.-  Pasé a tener la seguridad de lo que deseaba...
ALUMNO 2.- ¿Y a los cuarenta?
EL PROFESOR.- Las dudas retornaron a mí...
ALUMNO 3.-  ¿Y a los cincuenta?
EL PROFESOR.-  Descubrí que el Cielo tiene un proyecto para mí y para cada hombre sobre la faz de la Tierra...
ALUMNO 4.- ¿Y a los sesenta?
EL PROFESOR.- Comprendí este proyecto y encontré la tranquilidad para seguirlo...
ALUMNO 1.- ¿Y ahora a los setenta?
EL PROFESOR.-  Ahora a los setenta, puedo escuchar a mi corazón sin que me haga salir del camino de mi proyecto...
ALUMNO 2.- Entonces... ¿qué es lo que lo hace a usted diferente de los otros hombres que también siguen la voluntad del cielo o su proyecto?
EL PROFESOR.-  Yo trato de dividir esa voluntad con ustedes... Quien logra discutir una verdad antigua con una generación nueva, como ustedes, debe usar su capacidad de enseñar.  Esta es mi cualidad, mi proyecto es ser un buen profesor...
ALUMNO 3.- ¿Qué es un buen profesor?
EL PROFESOR.- El que examina todo lo que enseña, porque las ideas antiguas no pueden esclavizar al hombre, las ideas se adaptan y toman nuevas formas... Por eso hay que tomar las ideas del pasado sin olvidar los desafíos que propone el mundo presente.
ALUMNO 14.- ¿Y qué es un buen alumno?
EL PROFESOR.- Aquel que escucha lo que yo le digo, pero adapta mis enseñanzas a su vida.  Aquel que buscará no un buen empleo sino un trabajo que lo haga digno. Aquel que no busca ser notado, sino hacer algo notable... aquel que quiere no solo obtener una buena calificación numérica, sino aprender a desarrollarse en la vida.
FIN

De profesión "Mamá" (Texto)


TEXTO ORIGINAL: ANÓNIMO

VERSIÓN Y TEATRALIZACIÓN: SOL PIÑERO
(Obra reflexiva en un acto)

LA ACCIÓN SE DESARROLLA INICIALMENTE EN UNA OFICINA PÚBLICA DONDE SE ENCUENTRA UNA OFICIAL DE TRÁNSITO ATENDIENDO A LAS PERSONAS, SENTADA FRENTE A UN ESCRITORIO. AL MOMENTO LLEGA UNA SEÑORA CON UN NIÑO A SUMINISTRAR SUS DATOS. LA EMPLEADA APENAS SI LA VE, E INMEDIATAMENTE LE FORMULA LAS PREGUNTAS CORRESPONDIENTES.
NARRADOR: Estamos en una Oficina Publica de Tránsito.
NARRADORA: De esas oficinas, a donde nos toca ir por alguna deuda con el destino...
EMPLEADA: ¿Su nombre?
MADRE 1: Buenos días, María Antonieta Rojas
EMPLEADA: ¿A qué se dedica la señora?
MADRE 1: ¿A qué me dedico?
EMPLEADA: Sí, me refiero a si usted trabaja, o si es sólo...
MADRE 1: (INTERRUMPIÉNDOLA)... ¡Claro que trabajo! ¡Soy una madre a tiempo completo!. Trabajo mucho como mamá... (LOS NARRADORES HACEN GESTOS DE QUE SE MOLESTÓ LA SEÑORA)
EMPLEADA: Lo siento, señora, pero no colocamos “Madre” como opción en el formulario. Usualmente escribimos “Ama de Casa”. (LA SEÑORA SE ENOJA MIENTRAS LA FUNCIONARIA NI SE INMUTA, Y NI SIQUIERA LA MIRA A LA CARA CUANDO LE ENTREGA EL PAPEL). Tome, venga el próximo martes. Gracias. El siguiente.
(LA SEÑORA SALE INDIGNADA DE LA OFICINA Y LE CUENTA A UNA AMIGA QUE LA ESPERA AFUERA)
MADRE 1: ¿Te imaginas?... Se supone que ser Madre no es ningún trabajo, ninguna profesión...
MADRE 2: ¡Qué atrevimiento! ¿Y entonces quienes forman a los hombres y mujeres del mundo?... Ya vas a ver, voy a ir a esa oficina y voy a reivindicar a todas las madres... (SALEN PROTESTANDO, LOS NARRADORES SE VAN DE CURIOSOS DETRÁS DE ELLAS)
(LA ESCENA VUELVE A LA OFICINA DE TRÁNSITO, DONDE ESTÁ OTRA EMPLEADA VESTIDA IGUAL, PERO CON LA MISMA ACTITUD DE LA PRIMERA, Y SIN SIQUIERA MIRARLE LE HACE LA PRIMERA PREGUNTA)
EMPLEADA 2: ¿Cuál es su nombre, señora?
MADRE 2: Esperanza Santos
EMPLEADA 2: ¿A qué se dedica?
MADRE 2: Soy Investigadora Asociada en el Campo del Desarrollo Infantil.
(LA EMPLEADA 2 AL OÍR EL TÍTULO LEVANTA LA CARA Y FINALMENTE MIRA A LA SEÑORA)
EMPLEADA 2: ¿Me lo repite, por favor?
MADRE 2: ¡Sí, claro! ¡Cómo no! Soy una Investigadora Asociada en el Campo del Desarrollo Infantil.
EMPLEADA 2: ¿Me permite preguntarle algo? ¿Qué es exactamente lo que usted hace? Me parece interesante ese título.
NARRADOR: ¡Aaah, ahora sí le resulta interesante!
MADRE 2: Trabajo en un programa contínuo de investigación
NARRADORA: ¿Y qué madre no trabaja en eso?
MADRE 2: Realizo mi trabajo en el laboratorio...
NARRADOR: O sea en su casa...
MADRE 2: Aunque también hago trabajos de campo para experimentar más a fondo...
NARRADORA: Es decir, en la calle... y con otras familias.
(MIENTRAS ELLAS CONVERSAN, PARALELAMENTE EN LA ESCENA OCURREN ACCIONES COTIDIANAS COMO SI FUERA EN LA CASA Y EN LA CALLE)
MADRE 2: Actualmente me dedico a mi maestría.
NARRADOR: O sea, la familia completa.
MADRE 2: Y ya tengo inscritos cuatro créditos que estoy cursando...
NARRADORA: Sus cuatro hijos... (SE PRESENTAN LOS CUATRO HIJOS POR ORDEN DE TAMAÑO)
EMPLEADA 2: ¿Y qué tanta demanda tiene su trabajo?
MADRE 2: ¡Imagínese! Este trabajo tiene muchísima demanda en el campo de las Humanidades. Toda familia necesita de una Investigadora especial de dedicación casi exclusiva.
NARRADORA: ¿Habrá alguien que no esté de acuerdo en que en toda familia debe haber una madre?
EMPLEADA 2: ¿Y se trabaja mucho o su horario es flexible?
MADRE 2: Usualmente trabajo alrededor de 14 horas diarias (LA EMPLEADA SE SORPRENDE)
NARRADOR: Bueno, en realidad, son más, son como 24 horas diarias el trabajo de una madre...
NARRADORA: Pero no siempre son reconocidas...
MADRE 2: Pero aun así no me quejo, porque mi trabajo tiene más retos que cualquier trabajo sencillo... porque el resultado debe ser siempre un mejor ser humano.
EMPLEADA 2: Eso es sumamente importante... ¿Y qué tal la remuneración económica? ¿Trabaja en el sector público o privado?
MADRE 2: Yo, generalmente, trabajo en el sector privado... aunque también existen otras investigadoras dedicadas al sector público.
NARRADOR: ¡Seguro que sí! Son todas aquellas madres que viven atendiendo y cuidando a cualquier niño que se le atraviese por la calle y que piensan que todos son como sus hijos...
MADRE 2: ¿La remuneración? Bueno, como en todos los campos, uno siempre está buscando mejoras... porque la situación económica no pinta muy bien en estos días.  Pero por eso dedicamos muchas horas a la administración del dinero y del tiempo.
NARRADORA: Y si no le creen... vean a cualquier madre administrando el dinero para que llegue a fin de mes, y administrando las horas de un día para hacer tooooodo lo que tienen pendiente...
MADRE 2: Pero la remuneración más que sólo económica va más hacia la satisfacción personal, no olvide que soy Humanista...
EMPLEADA: ¡Oh, sí, me lo imagino! Su trabajo parece ser de gran importancia y trascendencia, además usted  habla con mucho orgullo de él. Se nota que trabaja con vocación...
MADRE 2:  ¡Gracias!
EMPLEADA: Bueno, creo que ya terminamos... Firme aquí, por favor y debe regresar el próximo jueves por su documento final.
(LA MADRE FIRMA, LA EMPLEADA LE DA LA MANO Y LA ACOMPAÑA PERSONALMENTE HASTA LA PUERTA DE SALIDA, LA SEÑORA AL SALIR HACE UN GESTO DE TRIUNFO)
(LA MADRE LLEGA HASTA EL OTRO LADO DE LA ESCENA DONDE ESTÁN SUS HIJOS QUIENES LA RECIBEN CON AGRADO)
NARRADOR: Al llegar a casa, la reciben tres de sus asociados en el laboratorio, o sea sus tres hijos. (SE OYE UN BEBÉ LLORANDO A LO LEJOS)
MADRE 2: Ya puedo escuchar a nuestro modelo experimental en el programa de desarrollo infantil probando un nuevo método de vocalización.
NARRADORA: Ese modelo experimental no es otro que su hijo de seis meses que está llorando...
(EL ESPOSO TAMBIÉN SALE A RECIBIRLA)
ESPOSO:  ¿Cómo te fue, querida? ¿Te dieron tu licencia?
MADRE 2: ¡Sí, como no! Y me trataron muy bien, debo volver el jueves.
NARRADOR: Ese es el socio mayoritario de esa empresa de investigación llamada familia, siempre presente en las reuniones y decisiones de la Junta Directiva.
ESPOSO: ¡Qué bueno! ¡Te lo mereces! Tengo que consultarte unas cosas que pienso hacer este fin de semana...
NARRADOR: Olvidamos hablar de las horas extras del fin de semana
MADRE 2: (SE SIENTA COMPLACIDA Y LLAMA A LA AMIGA POR TELÉFONO)  Sí, claro, pero primero déjame hacer una llamada... María Antonieta, te cuento que por fin le gané una a la burocracia en nombre de todas las madres. Entré a los registros oficiales como una persona muy distinguida e indispensable para la humanidad. Desde hoy somos Investigadoras Asociadas en el Campo del Desarrollo Infantil.
NARRADOR: Es decir, Madres como muchas, como todas las que tenemos y que vemos en cualquier parte y en todos lados.
MADRE 2: La maternidad puede ser una carrera gloriosa sobre todo si nos damos el título y la importancia que merecemos.
FIN

Dar y Recibir. (Texto)

      Texto: Anónimo
Teatralización: Sol Piñero

NARRADORA: A mi amiga Daniela, su hermano le dio un automóvil como regalo… y un día, cuando ella salió de su oficina vio que un niño de la calle estaba caminando alrededor de su brillante coche nuevo, admirándolo
NIÑO: (CON ASOMBRO) Señorita, ¿este es su carro?
DANIELA: ¡Sí! Este es mi carro, mi hermano me lo regaló.
NIÑO: (MAS ASOMBRADO AUN) ¿En serio? ¿Quiere decir que su hermano se lo regaló de verdad, verdad… y a que a usted no le costó nada?... ¡Guao! Me gustaría...!
NARRADORA: El niño dudó antes de hablar… Seguro que Daniela sabía lo que el niño le iba a decir…
DANIELA: (APARTE) ¡Ya sé! Seguro que le gustaría tener un hermano así”
NARRADORA: ¡Pero no!… Lo que el niño realmente le dijo estremeció a Daniela de pies a cabeza…
NIÑO: ¡Me gustaría poder ser un hermano así!
NARRADORA: Ahora Daniela era la que estaba asombrada…
DANIELA: ¿Te gustaría dar una vuelta en mi auto?
NIÑO: (CON ENTUSIASMO) ¡Claro que sí! ¡Me encantaría!
(AMBOS HACEN LOS GESTOS Y MOVIMIENTOS COM SI SE SUBIERAN A UN CARRO, Y DAN UN CORTO PASEO)
NARRADORA: Después de un corto paseo el niño preguntó emocionado y con los ojos brillantes
NIÑO: ¿Señorita, le importaría que pasáramos frente  a mi casa
NARRADORA: Daniela sonrió, ahora si creía saber lo que el muchacho quería.
DANIELA: Seguro que ahora ya sé lo que quiere: “Enseñarle a sus vecinos que puede pasear y llegar a su casa en un gran automóvil”
NIÑO: ¿Se puede detener donde están esas escaleras?
NARRADORA: El niño, subió corriendo y regresó al ratito, pero ahora no venía tan rápido, traía consigo a su hermanito enfermo y le ayudó a sentarse en el primer escalón mirando hacia el carro…
NIÑO: ¿La ves, Juan? Allí está... Ella es Daniela, tiene un carro nuevo y su hermano se lo regaló… a ella no le costó ni un centavo. Y algún día yo te voy a regalar uno igualito…
JUAN: ¿Entonces podré ver todas las cosas bonitas de la ciudad, de las que me has contado?
NIÑO: ¡Claro que sí
NARRADORA: Otra vez Daniela se había equivocado al pensar…
DANIELA: ¿Quieren que los tres vayamos a dar un paseo?
NARRADORA: Ese día Daniela comprendió con el corazón lo que Dios quería decir con aquello de que “hay más dicha en dar que en recibir"...

FIN

Arcalía, la Gran Tejedora. (Texto)

Cuento Original: María del Pilar Quintero.
Versión para Teatro: Sol Piñero

LA ESCENA COMIENZA EN EL CIELO DESDE DONDE ARCALÍA LA GRAN TEJEDORA, EMPIEZA SU LARGO VIAJE.
NARRADOR: Arcalía, la gran tejedora de las montañas quiso un día tejer un manto para abrigar a su hija la Esperanza, una estrella pequeñita que andaba por el cielo, titilando de frío.
ARCALÍA: Debo proteger a mi hija y por ello emprenderé un viaje muy largo por los bosques y páramos.
NARRADOR: Por aquellos lados del mundo vivían las madrinas de los pueblos y cada una de ellas le iba a dar a Arcalía un regalo muy especial: una madeja de hilo con una virtud.
ARCALÍA: Visitaré a la madrina del Norte, ella se llama Urquía (LA LLAMA A GRITOS) ¡Urquía! ¡Urquía!
NARRADOR: (COMO ACLARANDO) Urquía a veces se tarda un poco, porque vive en una montaña, en una gruta cubierta de helechos y musgos.
URQUÍA: Adelante, Arcalía, te preparé un poco de leche y miel, y como ya el viento me había dicho que venías tengo un regalo para tu hija, la Esperanza. Te daré el hilo brillante de la Intuición y con ella tus tejidos tendrán la virtud de dar a conocer le porvenir.
ARCALÍA: Muchas gracias, Urquía, guardaré el hilo de La Intuición y lo utilizaré de la mejor forma. (HACE UNA REVERENCIA Y SE DESPIDE)
NARRADOR: Arcalía, la gran tejedora, continuó su viaje y ahora visitaría a la madrina del Oeste.
ARCALÍA: Malía, madrina del oeste, aquí estoy visitando tu nube.
MALÍA: Arcalía, tejedora, bienvenida a las nubes de mi hogar, te estoy esperando con una taza de chocolate que yo misma te preparé con guayabita y clavos de olor. De regalo te daré el hilo del Valor, que es muy necesario en la vida. Tus tejidos tendrán el poder de darle valor a la gente. Aquí tienes un carrete de hilo delgado, pero muy fuerte.
ARCALÍA: Gracias, Malía, estaba segura de poder contar con tu ayuda. Necesito del Valor para proteger a mi hija la Esperanza. (HACE UNA REVERENCIA Y SE DESPIDE)
NARRADORA: La tejedora continuó su camino sin desmayar, descansando sólo a raticos. Atravesó montañas gigantes y pantanos profundos hasta llegar por fin a donde vivía Huissí, la madrina del Sur que vivía en una balsa en medio de la gran laguna.
HUISSÍ: Arcalía, tejedora del mundo. Te esperaba con mucho cariño y te preparé un atole de maíz tierno y también tengo para ti un hilo extensible que contiene la Paciencia. Te invito a descansar un rato en la serenidad del agua.
ARCALÍA: Gracias, Huissí, ya me hace falta descansar y recuperar algo de paz. Le daré el mejor uso que pueda a la Paciencia. Todos la necesitamos para aprender lo que hace falta. (HACE UNA REVERENCIA Y SE DESPIDE)
NARRADOR: Y Arcalía, siguió su camino, luego de refrescarse. Cruzó selvas boscosas, llanos ardientes y ríos caudalosos, hasta que llegó e la casa de Yara, la madrina del Este, que vivía en un tronco viejo cubierto de malangas, cayenas y orquídeas.
YARA: Bienvenida, Arcalía, tejedora. Te guardé una infusión de hierbas aromáticas. Ten confianza y paciencia y ya verás que lograrás todos tus deseos y tus tejidos traerán felicidad. Aquí tienes el ovillo de hilo brillante que contiene la Alegría.
ARCALÍA: ¡La Alegría!... Gracias, Yara. La Alegría es indispensable para cada cosa que hacemos, la rendiré para que esté en todas las tareas futuras. (HACE UNA REVERENCIA Y SE DESPIDE)
NARRADOR: Cuando Arcalía se marchó todas las madrinas de los cuatro puntos cardinales y resolvieron hacer un sortilegio para ayudarla aun más a realizar su deseo de proteger a su hija la Esperanza, (LAS 4 MADRINAS SE REUNEN COMO UN EQUIPO Y CUCHICHEAN ENTRE SI) por ello mandaron a llamar a un Colibrí para encomendarle en secreto esa misión. (ENTRA EL COLIBRÍ Y LE DICEN AL OIDO LO QUE TIENE QUE HACER, EL ESCUCHA CON ATENCIÓN Y LUEGO VA EN BUSCA DE ARCALÍA)
COLIBRÍ: (LA PERSIGUE HASTA ALCANZARLA) Arcalía, me encomendaron la misión de decirte que tú serás de ahora en adelante no solo, Arcalía, la gran tejedora, sino: Arcalía, la madrina de los tejedores del mundo. Los tejedores de sueños y de deseos, los tejedores del futuro y del progreso. Serás su protectora, cuando tejan tú serás invisible. El viento y la Lluvia serán tus ayudantes. (ENTRAN EL VIENTO Y LA LLUVIA)
VIENTO: (LE COLOCA UNA MEDALLA) Con los  hilos que te dieron las madrinas de los pueblos y  los hilos de los sueños de la gente de tu pueblo tejerás la trama.
LLUVIA: (LE COLOCA UN SOMBRERO DE ESTRELLAS) Tu tejido abrigará a tu hija, la estrella de la Esperanza. También el Sol y la Luna te acompañarán por siempre, pero desde lejos.
NARRADOR: Arcalía, emprendió, entonces su viaje de regreso a las montañas de la Sierra Nevada y al llegar a su hogar se vistió con su nuevo traje de Madrina de los Tejedores.
LLUVIA: (LE AYUDA A COLOCARSE SU NUEVO TRAJE Y ADORNOS) Este es tu nuevo traje Arcalía: Blusa de nubes, falda de lluvia, zarcillos de estrellas...
ARCALÍA: (BAILANDO) Con los hilos de la Intuición, la Paciencia, el Valor y la Alegría comenzaré la urdimbre de todos y el Viento y la Lluvia se encargarán velozmente de llevar la noticia por todos los confines de la sierra.
NARRADOR: (CAMINANDO DE UN LADO Y OTRO DE LA ESCENA) De pueblo en pueblo, de casa en casa, de niño en niño, de niña en niña... el Viento y la Lluvia hicieron su trabajo.
VIENTO: (LANZANDO SERPENTINAS A TODOS LADOS) Arcalía tejerá su gran manto y abrigará el encanto de las montañas mías. Las madrinas le dieron los hilos  de la urdimbre, ahora nos pide el hilo de los sueños para tejer la trama y con ella  todos tejeremos para que su hija, la Esperanza, estrella lejana nunca pase frío.LLUVIA: (LANZA PAPELILLOS) Desde todas las almohadas la gente dormida de los pueblos envió con el Viento los hilos de sueños para tejer la trama. Cada uno envío los hilos correspondientes.
URQUÍA: (LANZAN SERPENTINAS DE COLORES) Los niños y las niñas enviaron los hilos amarillos.
MALÍA: (LANZAN SERPENTINAS DE COLORES) Los sembradores y las sembradoras enviaron los hilos verdes.
HUSSÍ: (LANZAN SERPENTINAS DE COLORES) Los alfareros y artesanos enviaron los hilos ocres y sepias.
YARA: (LANZAN SERPENTINAS DE COLORES) Los herreros y constructores enviaron los hilos color fuego.
VIENTO: (LANZAN SERPENTINAS DE COLORES) Los navegantes de ríos y lagunas enviaron los hilos azules, turquesas y marinos.
LLUVIA: (LANZAN SERPENTINAS DE COLORES) Las mujeres enviaron los hilos rojos, rosados y fucsias.
URQUÍA: (LANZAN SERPENTINAS DE COLORES) Los hombres enviaron los hilos crudos, verdes y añiles.
YARA: (LANZAN SERPENTINAS DE COLORES) Los sabios enviaron los hilos  morados, violetas y lilas.
NARRADOR: Y Arcalía fue devanando muy feliz con mucho cuidado los hilos de los sueños, en las 49 lanzaderas de su gran telar, 7 colores y 7 matices para cada color.
VIENTO: Con todo eso, Arcalía tejió durante muchos días, meses y años el manto de los 7 colores que cubren la montaña y abrigan la Esperanza y anuncian la alegría después de la lluvia, anuncian la salida del arco iris...
LLUVIA: Es por eso que desde aquel día, en la sierra, cuando brilla el Sol y aparece la  neblina y la lluvia, las abuelas dicen que ha llegado Arcalía...
URQUÍA: Llegó Arcalía, la madrina de los tejedores, para tejer el arco iris con los sueños de todos nosotros.
MALÍA: Y así abrigar a su hija la Esperanza, una estrella chiquitica y titilante que nos acompaña cuando estamos dormidos y cuando estamos despiertos.
HUISSÍ: El Viento y la Lluvia ayudan a Arcalía, le lavan los hilos cuando el polvo le ha quitado el brillo a los colores de los sueños.
NARRADOR: Arcalía se convirtió en la Tejedora del mundo para abrigar a su hija a quien ella llama Esperanza...
NARRADOR: ¿Pero cual es el verdadero nombre de tu hija, Arcalía?
ARCALÍA: Su nombre es Venezuela, y su apellido Esperanza...
FIN